Un billetes es un papel moneda, esos con los que tú o tu familia pagan sus cuentas o salidas a divertirse o con los que compras la despensa en el super o en la tiendita de la esquina. Lo primero que debes conocer es que la guerra de Independencia de 1810 afecto por completo la economía de la Nueva Espala, hoy la República Mexicana. En ese entonces hubo escasez de monedas y la necesidad de contar con un medio de pago que se hizo urgente. En 1813, en San Miguel el Grande, Guanajuato, a unos ingeniosos hombres se les ocurrió realizar unas piezas de cartón, escribieron a mano, con tinta negra la denominación medio real, que era la moneda de aquella época y seguramente funcionaba como un vale por esa cantidad. Para hacerlo válido, le pusieron sus firmas. Se cree que esos hombres pudieron ser comerciantes, funcionarios y oficiales militares.
Lo que si es seguro es que con la historia interior, sabemos que fue el precedente del billete en México. Ya en el año de 1925, el Banco de México ordenó la impresión de la primera familia de billetes, la cual estuvo a cargo de la American Bank Note Company de Nueva York, todos fueron impresos en un papel oficial especial hecho de algodón. A lo largo del tiempo, las medidas de seguridad en los billetes han cambiado para hacer más difícil su falsificación.